Marina y Pablo son esas parejas que no te las puedes imaginar separadas, es como si fueran una sola, como si la vida les diera el mismo principio y el mismo final.
Después de unos meses de su gran festejo, decidieron volver a ponerse los trajes y salir a reivindicar su amor. Complicidad, risas, saltos, pero sobre todo Amor. Era como si el tiempo se congelara, como si todo girara alrededor de ellos.
El bosque, las rocas, los almendros, las hojas y las flores quedaron en segundo plano. Todo brillaba y la fuente eran ellos. El paisaje tenía un nuevo nombre “Marina y Pablo”.
27/06/2019